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Nuestra bienvenida al blog del Área de Igualdad de Oportunidades promovido por la Concejalía de Mujer, Sanidad y Servicios Sociales del Ayuntamiento de Astorga.
En el mismo encontraréis espacios de participación, noticias sobre cursos, subvenciones, actividades,..., y otras propuestas que nos vayan llegando.

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Asoc. para la Recuperación de la Memoria Histórica. 12 años abriendo fosas, cerrando heridas.

El viernes día 8 de junio, en la Biblioteca Municipal de Astorga, y dentro de las actividades complementarias a la exposición "Represión y muerte en el Magisterio de Castilla y León tendrá lugar la presentación oficial de la Asociación para la Recuperación de la Memoria Histórica, con sede en Ponferrada, bajo el título específico:
"ARMH. 12 años abriendo fosas, cerrando heridas".
Tres aspectos se plantearán a lo largo de la misma:
  • El pasado, presente y futuro de las exhumaciones de víctimas de la Guerra Civil Española, abordado por Marco Antonio González, vicepresidente de la ARMH.
  • La represión de los maestros republicanos y la documentación generada en archivos sobre varios caso de El Bierzo y León, por Alejandro Rodríguez, historiador, investigador y colaborador de la ARMH
  • La metodología en las exhumaciones de fosas comunes en España y los casos de las fosas de Lario, Matallana de Valmadrigal y Faramontanos de Tábara, que contenían maestros asesinados. Por René Pacheco, arqueólogo director de exhumanciones de la ARMH. 

Con esta charla queremos contribuir al conocimiento de una realidad que está ahí, latente en la herida de muchas personas, porque creemos que hay que conocer para analizar, elegir y decidir. Y porqur todas las verdades tienen varias caras y cuantas más se conozcan más cerca se estará de la verdad total. 
Aunque algunas personas puedan creerlo así, no pretendemos ahondar más en las heridas, sino curar aquellas que en su momento se cerraron en falso echando sobre ellas un manto de silencio forzado que no ha permitido el olvido sino más bien el resentimiento. Podríamos compararlo con el efecto que sobre las heridas  hacía ese producto que hace unos años estaba presente en casi todos los botiquines españoles, los polvos de azol, un producto cicatrizante de rápido efecto pero que lo que hacía en realidad era cerrar en falso las heridas. Así, si una herida era profunda, la utilización de estos polvos sobre la misma permitía una rápida cicatrización en la capa externa de la misma, pero manteniendo la herida abierta bajo la piel, con el consiguiente peligro de que esta aumentase, se infectase e incluso pudiera llegar a provocar una auténtica gangrena de la parte afectada.
Así, no se trata de remover viejas heridas para hacerla más grandes, sino de limpiar las existentes, quitándoles esa falsa piel cicatrizada para poder llegar a dignificar una situación que durante tanto tiempo ha estado gangrenando la salud de familias enteras. 
Una vez más hay que recordar que solo desde el conocimiento se puede evitar que los errores del pasado no se repitan ni en el presente ni en el futuro. Y que las cosas, los sucesos acaecidos no desaparecen de la historia por mucho que nos empeñemos en no hablar de ellos.