Castorina, por Amando Casado. |
Presidido por la hermosa fotografía que Amando Casado hizo de ella, para la exposición Castorina. Autorretrato/Selfportrait que hoy pone su punto y final en la Fundación Cerezales-Antonino y Cinia tras una exitosa asistencia de público, la Asociación de vecinos de San Andrés, le hizo ayer un entrañable homenaje a Castorina, en la sede de la asociación. Un homenaje a la mujer, a la vecina, a la profesora, pero también a la artista.
Comenzó el acto con la intervención del presidente de la Asociación, Fernando, quien le dio las gracias por haberle hecho creer en sí mismo, allá por los tiempos de su primera juventud, cuando fue profesora suya en el instituto.
Amando Casado hizo un breve recorrido por su vida y obra, para cederle luego el turno a Jesús Palmero quien nos introdujo un poco más en el proyecto que a través de la Fundación Cerezales ha permitido a un gran número de personas conocer un poco más de cerca a esta artista que no por personalmente humilde tiene menos importancia en su obra.
Y es que los grandes artistas, las grandes artistas, suelen ser así, humildes en su grandeza.
Tras disfrutar de un pequeño documento visual de 10 minutos, preparado por Amando y Palmero para dicha exposición, bajo el título de Madre Piedra, que nos acerca profundamente a la figura de Castorina y sus inquietudes, la propia Castorina nos fue comentando un gran número de las obras recogidas en esta muestra, una recopilación de sus trabajos más íntimos y personales.Obras escultóricas, bocetos, cartas y fotografías, así como el documental sobre su vida (que es un avance de una película que estos dos artistas preparan sobre ella), que reflejan «los temas centrales de su producción artística, siempre en torno a la maternidad, la mujer, el desnudo y la familia; y también aspectos sobre su proceso de creación".
Maternidad expuesta en Cerezales. Foto: Carlos González |
Castorina Fe Francisco de Diego, nació en Astorga un año de 1928, fecha que le gusta reivindicar porque, según ella misma dice, es su primer premio. Esta mujer, toda humildad y sencillez, es una voz viva, activa y autorizada de la escultura contemporánea en España, con una gran proyección a nivel regional y nacional. Pero también es una magnífica dibujante y una sorprendente poeta (aunque esta última faceta sea en gran parte desconocida).
Su figura debe ser, sin duda, un ejemplo vivo de una de esas mujeres que han abierto caminos para las siguientes generaciones. Una mujer aún muy desconocida por la gente más próxima.